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La Organización Internacional de Normalización (ISO) ha presentado la nueva versión de su popular norma ISO 26000, una guía sobre responsabilidad social, que podría redefinir cómo las empresas de todo el mundo consideran su impacto en la sociedad y el medio ambiente.

La norma ISO 26000, originalmente publicada en 2010, proporciona directrices sobre cómo las empresas pueden operar de manera ética y transparente para contribuir al desarrollo sostenible. La nueva revisión, ISO 26000:2023, introduce una serie de cambios significativos que reflejan las crecientes expectativas de los consumidores y los inversores sobre la conducta responsable de las empresas.

Una de las actualizaciones más importantes de la ISO 26000:2023 es una mayor énfasis en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas. La nueva norma anima a las empresas a alinear sus estrategias de responsabilidad social con estos objetivos, para contribuir de manera más efectiva a la lucha contra el cambio climático, la pobreza y la desigualdad.

Además, la ISO 26000:2023 introduce directrices más claras sobre la gobernanza corporativa ética, incluyendo medidas para prevenir la corrupción y el soborno, así como para garantizar la privacidad de los datos y la protección de los derechos humanos.

«La responsabilidad social ya no es una opción para las empresas. Es una necesidad.» dijo Sergio Mujica, secretario general de la ISO. «Con la ISO 26000:2023, proporcionamos a las empresas una hoja de ruta clara y completa para operar de manera responsable y contribuir a un futuro más sostenible«.

Las empresas están siendo alentadas a adoptar la nueva norma ISO 26000:2023 y a demostrar su compromiso con la responsabilidad social y el desarrollo sostenible. Si bien la ISO 26000 no es una norma certificable, sirve como una valiosa herramienta de gestión para las empresas que desean mejorar su imagen, reducir su riesgo y diferenciarse en un mercado cada vez más consciente de los aspectos éticos y sostenibles.